Después de esterilizar el medio de cultivo, se procede a verterlo en placas Petri.
Como el medio solidificó, se calentó en el microondas el tiempo justo para que se licuase sin que existiera un sobrecalentamiento.
A partir de entonces, se procede a esterilizar la boca del erlenmeyer y realizar el emplacado del medio de cultivo.
El emplacado se realiza de tal manera que al añadir el medio de cultivo líquido cubra la placa lo justo, 1-2 mm de espesor.
Las placas se dejan semiabiertas para que se escape el vapor de agua.
Una vez solidificado el medio de cultivo, se agrupan varias placas y se introducen en el frigorífico boca abajo para su posterior uso.